"Hay intereses al interior del Comité Olímpico Boliviano (COB), intereses que todavía no han sido alejados plenamente", dijo Marco Arze, presidente del COB, al hacer referencia a las denuncias que algunos atletas hicieron a su retorno a Bolivia, tras su participación en los Juegos Olímpicos Río.
A su regreso al país, los marchistas denunciaron que el Comité Olímpico Internacional (COI) habría destinado 2.500 dólares por atleta clasificado a Río 2016 como un premio, que haría un total de 30.000 dólares por ser 12 atletas olímpicos. Según los deportistas, se enteraron a través del comentario de atletas de otros países.
Después de que el tesorero del COB, Fabricio Pinto, diera una amplia explicación sobre el destino que se le dará a esos recursos y por qué no llegará a los atletas, Arze manifestó que los deportistas fueron utilizados para desinformar y desequilibrar la actual dirigencia del COB. "Los están utilizando a los atletas para crear desinformación, porque existen afanes políticos al interior del COB, porque hay una buena gestión. En nuestro primer año hicimos una inversión histórica de 853 mil dólares. Pero ya estamos averiguando", dijo Arze.
Descargo
Pinto explicó que todo el olimpismo internacional se rige bajo directrices que envía el COI. En 2013, se informó que existirá un apoyo a los Comités Olímpicos Nacionales (CON), pero recién en enero de este año se detalla en que consistirá ese apoyo.
"…Las distintas ayudas y subvenciones que serán asignadas a los CON que participarán en los Juegos Olímpicos Río 2016 (…) La contribución de Solidaridad Olímpica se compone de la siguiente manera: 1. Una ayuda de $us 16.000 para cubrir los gastos de logística; 2. Una contribución para los gastos de transporte y alojamiento de los Presidentes y Secretarios Generales de los CON por la suma de $us 10.000, por persona; 3. El reembolso de los pasajes de avión ida y vuelta (ruta directa, clase económica) para un máximo de seis atletas y dos oficiales; 4. Un subsidio de $us 2.500, multiplicado por la cantidad de atletas de su CON que hayan competido"
En la parte final de esta directriz señala que "…a fines de 2016 se enviará a cada CON que haya participado en los Juegos una subvención por su contribución al éxito de las olimpiadas. El cálculo de este subsidio se basará en la lista oficial de participantes proporcionada por el comité organizador".
Pinto explicó con esa normativa indica que "este dinero llega como una ayuda, un subsidio que es parte de los 77 mil dólares que se gastaron para el viaje a los Juegos".
"Esos 30 mil dólares ingresará a la caja común del COB y eso significa que con ello se cubrirán los gastos que ya se hicieron en la participación de nuestra delegación en Río, y si existe un remanente se lo debe gastar de acuerdo a las directrices aprobadas en el POA anual del COB", explicó Arze.
El dirigente olímpico manifestó que en ninguna parte de la norma dice que ese dinero sea un viático para los atletas, sino que es para solventar la participación de la delegación, atletas, entrenadores, dirigentes, cuerpo médico. Arze dijo que en su gestión trabajarán para dignificar al dirigente deportivo, motivo por el que continuarán transparentando todo el accionar del COB.
Los Tiempos
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jueves, 25 de agosto de 2016
jueves, 18 de agosto de 2016
OCTAVO ORO DE BOLT EN LOS OLÍMPICOS
Usain Bolt, el atleta más carismático desde la retirada del estadounidense Carl Lewis, obtuvo una rotunda victoria en la final de 200 metros con una marca de 19.78 y se colgó su octava medalla olímpica de oro, camino del triple-triple.
El astro jamaicano se hizo acompañar en el podio por su amigo, el canadiense Andre de Grasse (20.02) y por el francés Christophe Lemaitre, que se llevó el bronce con la misma marca (20.12) que el español Bruno Hortelano fijó en la primera ronda como nuevo récord de España.
Aclamado por la multitud, que esta vez, a diferencia de la final de 100 metros, no llenó por completo las gradas del estadio olímpico, Bolt ofreció al mundo la enésima muestra de superioridad en el esprint, ya sea el puro o el sostenido, aunque no pudo regalar a sus incondicionales la gran marca que pensaba.
Salvada sin contratiempos la salida, su fase de la carrera más débil, Bolt fue ganando terreno en la curva y llegó a la recta dos metros por delante de sus adversarios, a los que no concedió la menor opción. De Grasse, que había sido bronce en la final de 100, mejoró en 200 un peldaño en el podio de honor, adelantando en los últimos metros al estadounidense LaShawn Merrit, mientras por detrás progresó también Lemaitre hasta el tercer puesto.
Desde el oro del griego Kostas Kenteris en Sydney 2000 ningún otro velocista de raza blanca había subido al podio olímpico en 200 metros. Si Bolt abrigaba todavía alguna esperanza de batir un nuevo récord mundial, estaba pensando en el 200, la distancia en la que su tipología (1,95 de estatura, 94 kilos) le convierte en prácticamente imbatible.
Al abrigo de un fallo en la salida, la media pista le concede un margen suficiente para la corrección. En los últimos nueve años Bolt sólo había perdido una carrera de 200, cuando su compatriota Yohan Blake le batió -también en 100- en los campeonatos jamaicanos del 2012 que precedieron a su nuevo triplete olímpico en los Juegos de Londres. Su cosecha en el esprint sostenido impresiona: tres títulos olímpicos y cuatro mundiales.
EFE
El astro jamaicano se hizo acompañar en el podio por su amigo, el canadiense Andre de Grasse (20.02) y por el francés Christophe Lemaitre, que se llevó el bronce con la misma marca (20.12) que el español Bruno Hortelano fijó en la primera ronda como nuevo récord de España.
Aclamado por la multitud, que esta vez, a diferencia de la final de 100 metros, no llenó por completo las gradas del estadio olímpico, Bolt ofreció al mundo la enésima muestra de superioridad en el esprint, ya sea el puro o el sostenido, aunque no pudo regalar a sus incondicionales la gran marca que pensaba.
Salvada sin contratiempos la salida, su fase de la carrera más débil, Bolt fue ganando terreno en la curva y llegó a la recta dos metros por delante de sus adversarios, a los que no concedió la menor opción. De Grasse, que había sido bronce en la final de 100, mejoró en 200 un peldaño en el podio de honor, adelantando en los últimos metros al estadounidense LaShawn Merrit, mientras por detrás progresó también Lemaitre hasta el tercer puesto.
Desde el oro del griego Kostas Kenteris en Sydney 2000 ningún otro velocista de raza blanca había subido al podio olímpico en 200 metros. Si Bolt abrigaba todavía alguna esperanza de batir un nuevo récord mundial, estaba pensando en el 200, la distancia en la que su tipología (1,95 de estatura, 94 kilos) le convierte en prácticamente imbatible.
La fantástica carrera de @usainbolt con la que ganó su octava medalla de oro, esta vez en los 200 metros. #Rio2016 pic.twitter.com/H1ASHiEfWm— Paraguay Sport Press (@psp_paraguay) 19 de agosto de 2016
Al abrigo de un fallo en la salida, la media pista le concede un margen suficiente para la corrección. En los últimos nueve años Bolt sólo había perdido una carrera de 200, cuando su compatriota Yohan Blake le batió -también en 100- en los campeonatos jamaicanos del 2012 que precedieron a su nuevo triplete olímpico en los Juegos de Londres. Su cosecha en el esprint sostenido impresiona: tres títulos olímpicos y cuatro mundiales.
EFE
LOS LEONES GANAN EL ORO PARA ARGENTINA
¡Campeones olímpicos! El deporte argentino escribió otra de sus páginas más brillantes. El tercer oro llegó gracias a los Leones, esos espartanos audaces que se animaron a lo imposible y alcanzaron lo más grande que pueda conseguirse en el hockey sobre césped. El triunfo por 4 a 2 sobre Bélgica en el partido decisivo, con ese gol final de Agustín Mazzilli, que terminó sentado sobre la tabla del arco rival, es un premio a un extenso proceso y construido con coherencia, basado en una camada brillante de juniors campeones mundiales en 2005 y talentosos de distintas épocas, además de un cuerpo técnico valiente y capaz de potenciar al máximo las virtudes individuales. Pero por sobre todo, fue un equipo con todas las letras. Y ahí están ellos ahora, revoleando sus camisetas, ofrendando este logro inolvidable a la hinchada celeste y blanca, que copó las tribunas del estadio de Deodoro.
Hace 12 años, la Generación Dorada conmovió con la medalla dorada en Atenas 2004. Hoy, otro conjunto nacional que surgió desde el silencio, fuera de los grandes focos, pega este golpazo en el tablero, en un deporte históricamente comandado por Australia, Holanda y Alemania. Las Leonas fueron dominadoras desde Sydney 2000, ahora cambió el paradigma: llegó la hora de estos Leones todo terreno, que ya habían dado un enorme aviso con el tercer puesto en el Mundial de La Haya 2014. Ahora, a seguir creciendo para afrontar nuevos desafíos, también con la incorporación de nuevos elementos. Es de estos 19 valientes muchachos y también de Carlos Retegui , ese optimista incurable que logra sacar agua de las piedras. El seleccionado masculino debió pasar muchas malas para llegar a esta gesta, la más grande que pueda alcanzar.
Bélgica arrancó mejor el encuentro, manejando la bocha con paciencia mientras la Argentina esperaba en su campo. Cosyns abrió el marcador al minuto de juego y ese gol despertó a los Leones salieron a buscar el partido más adelante y consiguieron el empate mediante un corner corto, la fórmula que más éxito le dio durante el torneo, aunque utilizaron otra variante. El corner corto no fue ejecutado por Gonzalo Peillat, goleador argentino, sino que tras un amague, el capitán Pedro Ibarra arrastró la bocha y tras el desvío en un defensor, ingresó al arco.
Sobre el final del primer cuarto, Ignacio Ortíz, con un remate cruzado, dio vuelta el partido y en el inicio del segundo, Los Leones estiraron la diferencia con otro gol de corner corto, en esta ocasión de Gonzalo Peillat.
El tercer cuarto fue muy parejo, con Bélgica dominando en el juego pero sin posibilidades claras de gol hasta el final del mismo, cuando Boccard descontó con una gran jugada individual para dejar el partido 3-2 para los argentinos a un cuarto del final. En el final, el gol de Mazzilli sentenció la historia, cuando Bélgica ya jugaba sin arquero y buscaba de manera desesperada el gol que lo lleve a los penales.
La Nación
Hace 12 años, la Generación Dorada conmovió con la medalla dorada en Atenas 2004. Hoy, otro conjunto nacional que surgió desde el silencio, fuera de los grandes focos, pega este golpazo en el tablero, en un deporte históricamente comandado por Australia, Holanda y Alemania. Las Leonas fueron dominadoras desde Sydney 2000, ahora cambió el paradigma: llegó la hora de estos Leones todo terreno, que ya habían dado un enorme aviso con el tercer puesto en el Mundial de La Haya 2014. Ahora, a seguir creciendo para afrontar nuevos desafíos, también con la incorporación de nuevos elementos. Es de estos 19 valientes muchachos y también de Carlos Retegui , ese optimista incurable que logra sacar agua de las piedras. El seleccionado masculino debió pasar muchas malas para llegar a esta gesta, la más grande que pueda alcanzar.
Bélgica arrancó mejor el encuentro, manejando la bocha con paciencia mientras la Argentina esperaba en su campo. Cosyns abrió el marcador al minuto de juego y ese gol despertó a los Leones salieron a buscar el partido más adelante y consiguieron el empate mediante un corner corto, la fórmula que más éxito le dio durante el torneo, aunque utilizaron otra variante. El corner corto no fue ejecutado por Gonzalo Peillat, goleador argentino, sino que tras un amague, el capitán Pedro Ibarra arrastró la bocha y tras el desvío en un defensor, ingresó al arco.
Sobre el final del primer cuarto, Ignacio Ortíz, con un remate cruzado, dio vuelta el partido y en el inicio del segundo, Los Leones estiraron la diferencia con otro gol de corner corto, en esta ocasión de Gonzalo Peillat.
El tercer cuarto fue muy parejo, con Bélgica dominando en el juego pero sin posibilidades claras de gol hasta el final del mismo, cuando Boccard descontó con una gran jugada individual para dejar el partido 3-2 para los argentinos a un cuarto del final. En el final, el gol de Mazzilli sentenció la historia, cuando Bélgica ya jugaba sin arquero y buscaba de manera desesperada el gol que lo lleve a los penales.
La Nación
NADADORES DE EE.UU. INVENTARON ASALTO PARA ENCUBRIR BORRACHERA Y DESTROZOS
El supuesto asalto sufrido por nadadores estadounidenses en Río de Janeiro no se produjo y los deportistas en realidad se enfrentaron a guardias de seguridad en una gasolinera de Barra de Tijuca, donde se encuentra la villa olímpica, según la Policía brasileña.
Rayn Lochte, James Feigen, Gunnar Bentz y Jack Conger denunciaron haber sido víctimas de un asalto a punta de pistola por hombres que vestían uniformes de policía el pasado domingo. Sin embargo, el jefe de la policía Civil, Fernando Veloso, ha explicado este jueves al diario O Globo que la investigación realizada demuestra que el asalto no se produjo.
De acuerdo con O Globo, los deportistas habrían provocado daños en las instalaciones y se habrían negado a pagar, lo que obligó a intervenir a los agentes de seguridad. “Desafortunadamente, los nadadores contaron una mentira tras otra”, ha dicho un policía que ha visto las imágenes de lo ocurrido.
Esta nueva versión es radicalmente distinta a la que ofrecieron los atletas en un principio: aseguraron que fueron atracados por unos ladrones que se hicieron pasar por policías.
Sin embargo, las versiones eran contradictorias, lo que levantó las sospechas de la Policía, hasta el punto que la Justicia impidió que dos de los nadadores —Bentz y Conger— embarcaran en un avión de vuelta a EE.UU. hasta que se esclarezca qué ocurrió realmente.
Los deportistas se negaron a declarar durante las cuatro horas que permanecieron en la comisaría del aeropuerto internacional de Río, tras lo cual se trasladaron a un hotel próximo.
Rayn Lochte, James Feigen, Gunnar Bentz y Jack Conger denunciaron haber sido víctimas de un asalto a punta de pistola por hombres que vestían uniformes de policía el pasado domingo. Sin embargo, el jefe de la policía Civil, Fernando Veloso, ha explicado este jueves al diario O Globo que la investigación realizada demuestra que el asalto no se produjo.
De acuerdo con O Globo, los deportistas habrían provocado daños en las instalaciones y se habrían negado a pagar, lo que obligó a intervenir a los agentes de seguridad. “Desafortunadamente, los nadadores contaron una mentira tras otra”, ha dicho un policía que ha visto las imágenes de lo ocurrido.
Esta nueva versión es radicalmente distinta a la que ofrecieron los atletas en un principio: aseguraron que fueron atracados por unos ladrones que se hicieron pasar por policías.
Sin embargo, las versiones eran contradictorias, lo que levantó las sospechas de la Policía, hasta el punto que la Justicia impidió que dos de los nadadores —Bentz y Conger— embarcaran en un avión de vuelta a EE.UU. hasta que se esclarezca qué ocurrió realmente.
Los deportistas se negaron a declarar durante las cuatro horas que permanecieron en la comisaría del aeropuerto internacional de Río, tras lo cual se trasladaron a un hotel próximo.
miércoles, 17 de agosto de 2016
ESTADOS UNIDOS DESTROZÓ A ARGENTINA Y PASÓ A SEMIS
Estados Unidos pasó por encima de Argentina 105-78 este miércoles, clasificándose para las semifinales del torneo olímpico de baloncesto de Rio-2016, en el último partido con su selección de la estrella argentina Manu Ginóbili.
Los estadounidenses se anotaron su sexta victoria en seis partidos en los Juegos de Rio y se enfrentarán el viernes a España en semifinales, con la vista puesta en intentar conseguir su tercera medalla de oro consecutiva.
Los argentinos soñaron por un breve instante con la gesta de Atenas-2004 cuando ganaron en semifinales a los norteamericanos antes de colgarse el oro en la final, aprovechando unos primeros momentos de confusión del rival.
Los albicelestes lograron ponerse por delante en el marcador al inicio del encuentro, llegando a estar 19-9 arriba a cuatro minutos para el final del primer cuarto, llevado por el acierto de su base Facundo Campazzo (13 puntos).
A partir de ahí, apareció Kevin Durant para iniciar la remontada estadounidense hasta dar la vuelta al marcador y acabar el cuarto 25-21 por delante de los argentinos.
Durant fue el mejor anotador del encuentro con 27 puntos.
"Arrancamos bien, enchufados, intensos, al abandonar eso y dejar de defender creo que nos vamos" del partido, dijo Campazzo, tras el encuentro.
Tras darle la vuelta al marcador, Estados Unidos, que ya lleva 23 partidos olímpicos sin perder desde que, precisamente, cayó en Atenas-2004 ante Argentina, se hizo el amo y se acabó el partido.
Durant tomó las riendas del equipo, mientras bajo los aros DeAndre Jordan ganaba su batalla con Scola y los rebotes acababan en manos estadounidenses.
"Conocemos a los Estados Unidos. Es un equipo muy fuerte, muy atlético. Empezamos muy bien, lo mejor que pudimos, pero una vez que empezaron a controlar el tiempo del partido se nos fue el control", dijo Andrés Nocioni.
Punto a punto, Estados Unidos se fue al descanso 56-40 arriba, un marcador que no haría más que crecer a favor de los norteamericanos a la vuelta de la pausa.
En los dos últimos cuartos, los argentinos trataron de resistir a la avalancha estadounidense aupados por la numerosa y ruidosa hinchada albiceleste que llenó el pabellón Carioca Arena 1 del Parque Olímpico.
Sin embargo, Argentina nunca llegó a acercarse a menos de 15 puntos en esos últimos 20 minutos, que fueron ya prácticamente de jugadas de diversión para los dos equipos y para el público que contemplaba el partido.
"Estados Unidos es un equipo muy completo, agresivo, con jugadores muy comprometidos y Kevin Durant tuvo una gran noche", analizó el entrenador argentino, Sergio Hernández.
La derrota supone una triste despedida para Manu Ginóbili, una leyenda del baloncesto argentino que este miércoles jugó su último partido con la selección.
"Estoy orgulloso de haber sido parte de esto", de la selección que fue campeona olímpica en Atenas-2004 y bronce en Pekín-2008 o plata en el Mundial de Indianápolis de 2002.
Ginóbili, que jugó sus cuartos Juegos Olímpicos, se fue de la cancha llorando presa de la emoción.
Tras este partido, "estamos diciendo adiós a estos Juegos Olímpicos y a parte de uno de los mejores equipos del baloncesto internacional", sentenció Hernández.
La Información
Los estadounidenses se anotaron su sexta victoria en seis partidos en los Juegos de Rio y se enfrentarán el viernes a España en semifinales, con la vista puesta en intentar conseguir su tercera medalla de oro consecutiva.
Los argentinos soñaron por un breve instante con la gesta de Atenas-2004 cuando ganaron en semifinales a los norteamericanos antes de colgarse el oro en la final, aprovechando unos primeros momentos de confusión del rival.
Los albicelestes lograron ponerse por delante en el marcador al inicio del encuentro, llegando a estar 19-9 arriba a cuatro minutos para el final del primer cuarto, llevado por el acierto de su base Facundo Campazzo (13 puntos).
A partir de ahí, apareció Kevin Durant para iniciar la remontada estadounidense hasta dar la vuelta al marcador y acabar el cuarto 25-21 por delante de los argentinos.
Durant fue el mejor anotador del encuentro con 27 puntos.
"Arrancamos bien, enchufados, intensos, al abandonar eso y dejar de defender creo que nos vamos" del partido, dijo Campazzo, tras el encuentro.
Tras darle la vuelta al marcador, Estados Unidos, que ya lleva 23 partidos olímpicos sin perder desde que, precisamente, cayó en Atenas-2004 ante Argentina, se hizo el amo y se acabó el partido.
Durant tomó las riendas del equipo, mientras bajo los aros DeAndre Jordan ganaba su batalla con Scola y los rebotes acababan en manos estadounidenses.
"Conocemos a los Estados Unidos. Es un equipo muy fuerte, muy atlético. Empezamos muy bien, lo mejor que pudimos, pero una vez que empezaron a controlar el tiempo del partido se nos fue el control", dijo Andrés Nocioni.
Punto a punto, Estados Unidos se fue al descanso 56-40 arriba, un marcador que no haría más que crecer a favor de los norteamericanos a la vuelta de la pausa.
En los dos últimos cuartos, los argentinos trataron de resistir a la avalancha estadounidense aupados por la numerosa y ruidosa hinchada albiceleste que llenó el pabellón Carioca Arena 1 del Parque Olímpico.
Sin embargo, Argentina nunca llegó a acercarse a menos de 15 puntos en esos últimos 20 minutos, que fueron ya prácticamente de jugadas de diversión para los dos equipos y para el público que contemplaba el partido.
"Estados Unidos es un equipo muy completo, agresivo, con jugadores muy comprometidos y Kevin Durant tuvo una gran noche", analizó el entrenador argentino, Sergio Hernández.
La derrota supone una triste despedida para Manu Ginóbili, una leyenda del baloncesto argentino que este miércoles jugó su último partido con la selección.
"Estoy orgulloso de haber sido parte de esto", de la selección que fue campeona olímpica en Atenas-2004 y bronce en Pekín-2008 o plata en el Mundial de Indianápolis de 2002.
Ginóbili, que jugó sus cuartos Juegos Olímpicos, se fue de la cancha llorando presa de la emoción.
Tras este partido, "estamos diciendo adiós a estos Juegos Olímpicos y a parte de uno de los mejores equipos del baloncesto internacional", sentenció Hernández.
La Información
GOLEADA Y JOGO BONITO PARA LLEGAR A LA FINAL
La selección de Brasil goleó este miércoles por 6-0 sobre Honduras y se clasificó a la final de los Juegos Olímpicos de Río-2016. Los 'catrachos', dirigidos por el colombiano Jorge Luis Pinto, no pudieron con el peso del Maracaná.
Desde los 14 segundos del partido, Neymar abrió el marcador para los locales. El capitán la selección de Brasil marcó el gol más rápido de la historia de los Olímpicos. Esa anotación puso en aprietos a los hondureños que lucieron perdidos en el campo de Río de Janeiro.
Otro jugador que brilló en el equipo local fue Gabriel Jesús. El delantero, que recién compró Manchester City, marcó doblete. Celebró en 26 y en el 34 para poner el 3-0 parcial.
En el segundo tiempo, Brasil entró a demostrar la superioridad y Marquinhos anotó en el minuto 51 el 4-0, que puso a bailar a los locales.
Con un Honduras sin argumentos y con Jorge Luis Pinto dándole ánimo a sus pupilos cayó el quinto de Brasil. Luan, al 79, infló las redes del Maracaná.
Al final y para cerrar una tarde soñada para Brasil, Neymar anotó el sexto gol, de penalti, y puso la media docena en el marcador.
Brasil clasificó a la final y enfrentará a Alemania, que derrotó 2-0 a Nigeria en la otra semifinal.
Futbolred
Desde los 14 segundos del partido, Neymar abrió el marcador para los locales. El capitán la selección de Brasil marcó el gol más rápido de la historia de los Olímpicos. Esa anotación puso en aprietos a los hondureños que lucieron perdidos en el campo de Río de Janeiro.
Otro jugador que brilló en el equipo local fue Gabriel Jesús. El delantero, que recién compró Manchester City, marcó doblete. Celebró en 26 y en el 34 para poner el 3-0 parcial.
En el segundo tiempo, Brasil entró a demostrar la superioridad y Marquinhos anotó en el minuto 51 el 4-0, que puso a bailar a los locales.
Con un Honduras sin argumentos y con Jorge Luis Pinto dándole ánimo a sus pupilos cayó el quinto de Brasil. Luan, al 79, infló las redes del Maracaná.
Al final y para cerrar una tarde soñada para Brasil, Neymar anotó el sexto gol, de penalti, y puso la media docena en el marcador.
Brasil clasificó a la final y enfrentará a Alemania, que derrotó 2-0 a Nigeria en la otra semifinal.
Futbolred
martes, 16 de agosto de 2016
ROBSON LE REGALA A BRASIL SU TERCER ORO
Tenía días de no poder dormir, pensando en la promesa que le hizo a todo Brasil: Darle el primer oro en el boxeo de unos Juegos Olímpicos.
El martes, horas antes de la final, Robson Conceicao se tiró a la cama, se relajó con algo de música y rezó para pedir "protección y sabiduría".
Terminó la noche regalándole a su país esa presea dorada y con el estruendoso aliento de casa, al imponerse en la final de la división ligera (menos 60 kilogramos) del boxeo en Río de Janeiro.
"Mi meta era esa, aunque el camino era muy difícil", dijo el brasileño, bronce en el Mundial de Catar del año pasado y 17mo en Beijing y Londres, en menos 57 kilogramos y menos 60, respectivamente. "Cumplí mi promesa".
Conceicao, de 27 años, superó ampliamente al francés Sofiane Oumiha por decisión unánime con tarjetas de 30-27, 29-28 y 29-28.
El historial de Brasil en el deporte de los puños en estas justas se circunscribía hasta ahora en una plata y tres bronces.
El francés Oumiha se quedó con la plata, mientras que los dos bronces se los quedaron el cubano Lázaro Álvarez —que era el favorito y primer preclasificado— y Otgondalai Dorjnyambuu, de Mongolia.
Brasil puso así la nota alta en una jornada en que Cuba finalmente metió a unos de sus pugilistas en la carrera hacia el oro, aunque perdió a dos boxeadores más en la ronda de los cuartos, para quedarse solamente con cuatro de los 10 que trajo.
Cuba vino a superar los dos oros que alcanzó en Londres 2012, pero ha estado ausente en lo más alto del podio en las tres primeras finales disputadas hasta ahora en las categorías minimosca, ligero y pesada. En las tres se ha tenido que conformarse con bronces.
Temprano en la fecha, el tricampeón mundial Julio César La Cruz cumplió los pronósticos y superó al francés Mathieu Bauderlique para poner a la isla en la primera final en los pesos semipesados (menos 81 kilogramos).
En tanto, el monarca olímpico Robeisy Ramírez avanzó a las semifinales en la categoría gallo al despachar por decisión unánime (3-1) al chino Jiawei Zhang.
Pero Cuba sufrió la eliminación de Leiner Pero en los súper pesado y Yasnier Toledo en los welter ligero. Pero fue noqueado en el segundo asalto por el croata Filip Hrgovic.
El revés de Toledo llamó la atención porque su vencedor fue Lorenzo Sotomayor, quien pelea para Azerbaiyán y que aseguró al menos la medalla de bronce al clasificarse a las semifinales.
Lorenzo, de quien se dice es pariente lejano del medallista olímpico y plusmarquista en salto alto Javier Sotomayor, pasó corriendo la zona de prensa.
Toledo sí dio la cara y dijo que asumió la pelea como si estuviese enfrentando a un rival de otro país.
"El formó parte de la preselección de boxeo nacional en algún momento, pero ya pelea para otro país", dijo Toledo a The Associated Press. "Lo vencí en al menos tres ocasiones antes, pero a él le salieron mejor las cosas hoy".
TDS
El martes, horas antes de la final, Robson Conceicao se tiró a la cama, se relajó con algo de música y rezó para pedir "protección y sabiduría".
Terminó la noche regalándole a su país esa presea dorada y con el estruendoso aliento de casa, al imponerse en la final de la división ligera (menos 60 kilogramos) del boxeo en Río de Janeiro.
"Mi meta era esa, aunque el camino era muy difícil", dijo el brasileño, bronce en el Mundial de Catar del año pasado y 17mo en Beijing y Londres, en menos 57 kilogramos y menos 60, respectivamente. "Cumplí mi promesa".
Conceicao, de 27 años, superó ampliamente al francés Sofiane Oumiha por decisión unánime con tarjetas de 30-27, 29-28 y 29-28.
El historial de Brasil en el deporte de los puños en estas justas se circunscribía hasta ahora en una plata y tres bronces.
El francés Oumiha se quedó con la plata, mientras que los dos bronces se los quedaron el cubano Lázaro Álvarez —que era el favorito y primer preclasificado— y Otgondalai Dorjnyambuu, de Mongolia.
Brasil puso así la nota alta en una jornada en que Cuba finalmente metió a unos de sus pugilistas en la carrera hacia el oro, aunque perdió a dos boxeadores más en la ronda de los cuartos, para quedarse solamente con cuatro de los 10 que trajo.
Cuba vino a superar los dos oros que alcanzó en Londres 2012, pero ha estado ausente en lo más alto del podio en las tres primeras finales disputadas hasta ahora en las categorías minimosca, ligero y pesada. En las tres se ha tenido que conformarse con bronces.
Temprano en la fecha, el tricampeón mundial Julio César La Cruz cumplió los pronósticos y superó al francés Mathieu Bauderlique para poner a la isla en la primera final en los pesos semipesados (menos 81 kilogramos).
En tanto, el monarca olímpico Robeisy Ramírez avanzó a las semifinales en la categoría gallo al despachar por decisión unánime (3-1) al chino Jiawei Zhang.
Pero Cuba sufrió la eliminación de Leiner Pero en los súper pesado y Yasnier Toledo en los welter ligero. Pero fue noqueado en el segundo asalto por el croata Filip Hrgovic.
El revés de Toledo llamó la atención porque su vencedor fue Lorenzo Sotomayor, quien pelea para Azerbaiyán y que aseguró al menos la medalla de bronce al clasificarse a las semifinales.
Lorenzo, de quien se dice es pariente lejano del medallista olímpico y plusmarquista en salto alto Javier Sotomayor, pasó corriendo la zona de prensa.
Toledo sí dio la cara y dijo que asumió la pelea como si estuviese enfrentando a un rival de otro país.
"El formó parte de la preselección de boxeo nacional en algún momento, pero ya pelea para otro país", dijo Toledo a The Associated Press. "Lo vencí en al menos tres ocasiones antes, pero a él le salieron mejor las cosas hoy".
TDS
MARACANAZO DE SUECIA
El desarrollo de los 120 minutos estuvo lejos de parecerse al 5-1 que Brasil le endosó a las suecas en la primera fase en el Engenhao.
En esta ocasión, las escandinavas apretaron donde tenían que hacerlo y contaron con una Lindahl inspiradísima para sacar el arco en cero y luego lucirse en los penales parando dos cobros.
Brasil tuvo el papel protagónico desde el comienzo y se adueñó del control del mediocampo con una muy buena tarea de Marta por el sector izquierdo sueco, ayudada por el despliegue de Formiga y Thaisa para maniatar a las escandinavas en su sector.
Las ‘Blagutt’ se las ingeniaron de todas formas para generar un par de aproximaciones interesantes, pero que no amenazaron el arco de Bárbara.
La seleçao empezó a llegar con riesgo sobre los 20 minutos, y arañó la ventaja en dos situaciones de gol con Debinha, una salvada por la golera Lindahl en espectacular vuelo, además de un remate de Marta que pasó cerca del vertical derecho con la ‘1’ sin chance.
No cambió mucho el desarrollo en la segunda parte, con un Brasil como dominador cómodo y Suecia entregada en defensa con dos líneas de cuatro muy juntas para impedir que la pelota llegara con riesgo al área de Lindahl.
Marta siguió dándose un festín entrando por la izquierda pero la experimentada golera de 33 años le negó el gol en dos remates, así como a Beatriz después de una linda jugada colectiva con Tamires.
A pesar de llegar con poca frecuencia, Suecia perdió una ocasión de abrir el marcador con una pelota de Asllani que se cruzó de palo a palo y no encontró receptora.
Brasil se pellizcó por permitirse ese susto y cargó con todo lo que tenía, pero la ‘1’ Lindahl, en una tarde inspirada, cerró su arco y le quitó el gol a Formiga en la última jugada de los 90 minutos para forzar el tiempo extra y luego la definición por penales, donde Suecia tuvo mejor suerte para meterse contra todo pronóstico en la final.
Lotta Schelin, Caroline Seger, Nilla Fischer y Lisa Dahlkvist marcaron desde el punto blanco, mientras que la golera brasileña, Bárbara, atajó el disparo de Kosovare Asllani.
Por Brasil anotaron Marta, Andressa Alves y Rafaelle. La golera Hedvig Lindahl, figura del partido, detuvo las ejecuciones de Cristiane y Andressa.
AFP
En esta ocasión, las escandinavas apretaron donde tenían que hacerlo y contaron con una Lindahl inspiradísima para sacar el arco en cero y luego lucirse en los penales parando dos cobros.
Brasil tuvo el papel protagónico desde el comienzo y se adueñó del control del mediocampo con una muy buena tarea de Marta por el sector izquierdo sueco, ayudada por el despliegue de Formiga y Thaisa para maniatar a las escandinavas en su sector.
Las ‘Blagutt’ se las ingeniaron de todas formas para generar un par de aproximaciones interesantes, pero que no amenazaron el arco de Bárbara.
La seleçao empezó a llegar con riesgo sobre los 20 minutos, y arañó la ventaja en dos situaciones de gol con Debinha, una salvada por la golera Lindahl en espectacular vuelo, además de un remate de Marta que pasó cerca del vertical derecho con la ‘1’ sin chance.
No cambió mucho el desarrollo en la segunda parte, con un Brasil como dominador cómodo y Suecia entregada en defensa con dos líneas de cuatro muy juntas para impedir que la pelota llegara con riesgo al área de Lindahl.
Marta siguió dándose un festín entrando por la izquierda pero la experimentada golera de 33 años le negó el gol en dos remates, así como a Beatriz después de una linda jugada colectiva con Tamires.
A pesar de llegar con poca frecuencia, Suecia perdió una ocasión de abrir el marcador con una pelota de Asllani que se cruzó de palo a palo y no encontró receptora.
Brasil se pellizcó por permitirse ese susto y cargó con todo lo que tenía, pero la ‘1’ Lindahl, en una tarde inspirada, cerró su arco y le quitó el gol a Formiga en la última jugada de los 90 minutos para forzar el tiempo extra y luego la definición por penales, donde Suecia tuvo mejor suerte para meterse contra todo pronóstico en la final.
Lotta Schelin, Caroline Seger, Nilla Fischer y Lisa Dahlkvist marcaron desde el punto blanco, mientras que la golera brasileña, Bárbara, atajó el disparo de Kosovare Asllani.
Por Brasil anotaron Marta, Andressa Alves y Rafaelle. La golera Hedvig Lindahl, figura del partido, detuvo las ejecuciones de Cristiane y Andressa.
AFP
SE LANZA DE PALOMITA PARA GANAR EL ORO
Shaunae Miller, de Bahamas, se lanzó de "palomita" sobre la línea de meta para conquistar el título olímpico de 400 metros en los Juegos de Río 2016 y así le impidió a la estadounidense Allyson Felix ser la primera atleta de la historia con cinco medallas de oro olímpicas.
Miller, en un final agónico, cerró la vuelta a la pista en 49´44´´, el mejor registro de su vida. Felix, que la llegó a pasar en la recta, terminó segunda en 49´51´´, y la jamaicana Shericka Jackson se colgó la medalla de bronce con 49´85´´.
Miller dio rienda suelta a su alegría cuando aparecieron los tiempos oficiales en el videomarcador del estadio Olímpico, después de permanecer unos segundos a la expectativa, sin saber quien había ganado. La bahameña parecía haber sentenciado la carrera en mitad de la recta final con tres metros de ventaja, pero Allyson fue recortando la diferencia en el sprint, y cuando parecía que había superado a Miller, ésta se lanzó en plancha sobre la raya y se quedó con el triunfo.
Miller, abanderada de Bahamas en la ceremonia inaugural de los Juegos, no ha perdido una sola de las cinco carreras que ha hecho este año.
Felix se había recuperado de una lesión de tobillo que sufrió en abril y, aunque no pudo obtener plaza en el equipo norteamericano para defender su título olímpico en 200, llegó a Río con el objetivo de convertirse en la primera atleta con cinco medallas de oro olímpicas y en una de las pocas que han sido campeonas en 200 y 400.
Con 13 títulos globales a lo largo de su carrera, la californiana, de 30 años, afrontaba sus últimos Juegos con el deseo de emular a Betty Cuthbert, Irena Szewinska, Valerie Brisco-Hooks y Marie Jose-Perec, que fueron campeonas olímpicas de 200 y 400.
La Nación
Miller, en un final agónico, cerró la vuelta a la pista en 49´44´´, el mejor registro de su vida. Felix, que la llegó a pasar en la recta, terminó segunda en 49´51´´, y la jamaicana Shericka Jackson se colgó la medalla de bronce con 49´85´´.
Miller dio rienda suelta a su alegría cuando aparecieron los tiempos oficiales en el videomarcador del estadio Olímpico, después de permanecer unos segundos a la expectativa, sin saber quien había ganado. La bahameña parecía haber sentenciado la carrera en mitad de la recta final con tres metros de ventaja, pero Allyson fue recortando la diferencia en el sprint, y cuando parecía que había superado a Miller, ésta se lanzó en plancha sobre la raya y se quedó con el triunfo.
Miller, abanderada de Bahamas en la ceremonia inaugural de los Juegos, no ha perdido una sola de las cinco carreras que ha hecho este año.
Felix se había recuperado de una lesión de tobillo que sufrió en abril y, aunque no pudo obtener plaza en el equipo norteamericano para defender su título olímpico en 200, llegó a Río con el objetivo de convertirse en la primera atleta con cinco medallas de oro olímpicas y en una de las pocas que han sido campeonas en 200 y 400.
Que tal final de los 400m mujeres. "Raspada pero con oro". Miller de Bahamas . #Rio2016 pic.twitter.com/sRWa5hH4hR— JorgePérez (@SrPerex) 16 de agosto de 2016
Con 13 títulos globales a lo largo de su carrera, la californiana, de 30 años, afrontaba sus últimos Juegos con el deseo de emular a Betty Cuthbert, Irena Szewinska, Valerie Brisco-Hooks y Marie Jose-Perec, que fueron campeonas olímpicas de 200 y 400.
La Nación
THIAGO BRAZ INSCRIBE SU NOMBRE EN LA HISTORIA OLÍMPICA
Thiago Braz DaSilva, logró el oro en los Juegos Olímpicos de Rio 2016, al vencer al gran favorito, recórdman del mundo y campeón en Londres 2012, el francés Renaud Lavillenie.
El estadounidense Sam Kendricks se colgó la medalla de bronce. Braz fue el único que logró saltar por encima de los 6.03 metros, marcando así además un nuevo récord olímpico. Lo hizo en el segundo intento, mientras que Lavillenie fracasó en sus dos intentos sobre esta marca y aunque intentó un último salto en 6.08 metros, no lo superó.
Braz le da así a Brasil, país anfitrión, su segundo oro en estos Juegos Olímpicos, tras el conseguido por la judoca Rafaela Silva. El joven saltador, de 22 años recién cumplidos, ganó en 2012 el campeonato del mundo junior en la modalidad de salto con garroche, y en 2013 se proclamó campeón de Sudamérica, con un récord de 5.83 metros, un récord que batió de nuevo en 2015 en Bakú (Azerbaijan), para dejarlo en 5.92 metros.
Éste es el primer oro Olimpico para Braz, pero no lo es para su entrenador, el ucraniano Vitaly Petrov, que fuera también el entrenador de Sergey Bubka (legendario saltador de garrocha, oro en Seúl 88) y de la rusa Yelena Isinbayeva (oro en Pekín 2008).
La carrera de Thiago promete, puesto que ha vencido en estos Juegos a la actual gran estrella del salto con garrocha internacional, el francés Lavillenie, número uno de los últimos cuatro años en la Golden League y que ha terminado en el podio en los últimos cuatro mundiales de atletismo.
Lavillenie, que posee el récord del mundo en 6.16 metros de altura, tuvo un concurso limpio en Rio 2016 hasta que llegó a los 6.03 metros, altura que no logró sobrepasar en ninguno de los dos intentos.
El estadounidense Sam Kendricks se colgó la medalla de bronce. Braz fue el único que logró saltar por encima de los 6.03 metros, marcando así además un nuevo récord olímpico. Lo hizo en el segundo intento, mientras que Lavillenie fracasó en sus dos intentos sobre esta marca y aunque intentó un último salto en 6.08 metros, no lo superó.
Braz le da así a Brasil, país anfitrión, su segundo oro en estos Juegos Olímpicos, tras el conseguido por la judoca Rafaela Silva. El joven saltador, de 22 años recién cumplidos, ganó en 2012 el campeonato del mundo junior en la modalidad de salto con garroche, y en 2013 se proclamó campeón de Sudamérica, con un récord de 5.83 metros, un récord que batió de nuevo en 2015 en Bakú (Azerbaijan), para dejarlo en 5.92 metros.
Éste es el primer oro Olimpico para Braz, pero no lo es para su entrenador, el ucraniano Vitaly Petrov, que fuera también el entrenador de Sergey Bubka (legendario saltador de garrocha, oro en Seúl 88) y de la rusa Yelena Isinbayeva (oro en Pekín 2008).
La carrera de Thiago promete, puesto que ha vencido en estos Juegos a la actual gran estrella del salto con garrocha internacional, el francés Lavillenie, número uno de los últimos cuatro años en la Golden League y que ha terminado en el podio en los últimos cuatro mundiales de atletismo.
Lavillenie, que posee el récord del mundo en 6.16 metros de altura, tuvo un concurso limpio en Rio 2016 hasta que llegó a los 6.03 metros, altura que no logró sobrepasar en ninguno de los dos intentos.
domingo, 14 de agosto de 2016
SIMPLEMENTE BOLT
Usain Bolt ganó esta noche su primera medalla de oro en Río 2016, aunque sin añadir un nuevo récord a su lista de marcas batidas en los Juegos Olímpicos. El corredor jamaiquino se impuso con un tiempo de 9,81 que le bastó para dejar atrás a sus rivales.
Usain Bolt llegó a la final con 29 años y dos récords en 100 metros planos a cuestas. El récord olímpico logrado por el jamaiquino en Londres 2012 fue establecido en 9,63 segundos. mientras tanto, el récord mundial (logrado en Berlín el 2009) fue de 9,58.
"Alguien dijo que puedo llegar a ser inmortal. Otras dos medallas y me puedo ir. A otra cosa. Inmortal", declaró Usain Bolt tras cosechar una victoria de la que algunos habían dudado. El jamaiquino todavía va a correr los 200 y el relevo de 4x100.
"Hice una carrera brillante. No estuve tan rápido, pero me alegro de haber ganado. Les dije que iba a ganar", afirmó Usain Bolt, que payaseó en la pista según su costumbre y se metió al público en el bolsillo, al punto de que varios espectadores abuchearon a Gatlin, su principal rival.
Usain Bolt ha ganado cada competencia individual importante en la que participó desde 2008, con excepción de la del Mundial 2011, cuando fue descalificado por una partida en falso. Esto equivale a cinco oros olímpicos y siete en los torneos planetarios.
Esta vez Usain Bolt no pudo reeditar en Río 2016 actuaciones como las de aquella vez pero aún así dejó en segundo lugar a Justin Gatlin, a quien aventajó apenas por ocho centésimas de segundo en la carrera de 100 metros planos.
El Comercio
Usain Bolt llegó a la final con 29 años y dos récords en 100 metros planos a cuestas. El récord olímpico logrado por el jamaiquino en Londres 2012 fue establecido en 9,63 segundos. mientras tanto, el récord mundial (logrado en Berlín el 2009) fue de 9,58.
"Alguien dijo que puedo llegar a ser inmortal. Otras dos medallas y me puedo ir. A otra cosa. Inmortal", declaró Usain Bolt tras cosechar una victoria de la que algunos habían dudado. El jamaiquino todavía va a correr los 200 y el relevo de 4x100.
"Hice una carrera brillante. No estuve tan rápido, pero me alegro de haber ganado. Les dije que iba a ganar", afirmó Usain Bolt, que payaseó en la pista según su costumbre y se metió al público en el bolsillo, al punto de que varios espectadores abuchearon a Gatlin, su principal rival.
Usain Bolt ha ganado cada competencia individual importante en la que participó desde 2008, con excepción de la del Mundial 2011, cuando fue descalificado por una partida en falso. Esto equivale a cinco oros olímpicos y siete en los torneos planetarios.
Esta vez Usain Bolt no pudo reeditar en Río 2016 actuaciones como las de aquella vez pero aún así dejó en segundo lugar a Justin Gatlin, a quien aventajó apenas por ocho centésimas de segundo en la carrera de 100 metros planos.
El Comercio
MURRAY FRENÓ A DELPO Y SE QUEDÓ CON EL ORO
Juan Martín del Potro hizo todo lo que pudo, incluso dejó en el camino a Novak Djokovic y a Rafael Nadal en las etapas previas, pero en la final ya no le alcanzaron las fuerzas.
Andy Murray es, por segunda vez consecutiva, ganador de la medalla olímpica de oro en tenis masculino individual.
Este domingo, el británico derrotó al argentino por tres sets a uno: 7-5, 4-6, 6-2 y 7-5.
La final se jugó al mejor de cinco sets.
Del Potro estuvo cerca de forzar el tie-break sobre el final y buscar definir todo en un último set, pero la imprecisión de sus tiros finales le costaron el partido.
Murray, en cambio, se mostró mucho más sólido en su juego y en mejor estado físico.
El sábado en semifinales, Del Potro combatió por más de tres horas frente a Rafael Nadal, mientras el británico despachó al japonés Kei Nishikori en sets corridos.
A pesar de las diferencias físicas y de rendimiento entre los tenistas, el encuentro duró más de cuatro horas.
El británico se convirtió en el primer jugador en la historia del tenis olímpico en ganar dos medallas de oro consecutivas.
Murray llegó a Río 2016 en el segundo lugar del ranking de la ATP, mientras que Del Potro ocupa el lugar 141.
Más allá del resultado final, el argentino fue el gran animador del tenis masculino al vencer al número 1 del mundo Novak Djokovic y al español Rafael Nadal en una misma semana.
BBC
Andy Murray es, por segunda vez consecutiva, ganador de la medalla olímpica de oro en tenis masculino individual.
Este domingo, el británico derrotó al argentino por tres sets a uno: 7-5, 4-6, 6-2 y 7-5.
La final se jugó al mejor de cinco sets.
Del Potro estuvo cerca de forzar el tie-break sobre el final y buscar definir todo en un último set, pero la imprecisión de sus tiros finales le costaron el partido.
Murray, en cambio, se mostró mucho más sólido en su juego y en mejor estado físico.
El sábado en semifinales, Del Potro combatió por más de tres horas frente a Rafael Nadal, mientras el británico despachó al japonés Kei Nishikori en sets corridos.
A pesar de las diferencias físicas y de rendimiento entre los tenistas, el encuentro duró más de cuatro horas.
El británico se convirtió en el primer jugador en la historia del tenis olímpico en ganar dos medallas de oro consecutivas.
Murray llegó a Río 2016 en el segundo lugar del ranking de la ATP, mientras que Del Potro ocupa el lugar 141.
Más allá del resultado final, el argentino fue el gran animador del tenis masculino al vencer al número 1 del mundo Novak Djokovic y al español Rafael Nadal en una misma semana.
BBC
CATERINE IBARGÜEN LA REINA COLOMBIANA DEL SALTO
Caterine Ibargüen conquistó el oro en la prueba de Salto Triple de los Juegos Olímpicos e hizo sonar el himno nacional de Colombia por cuarta vez en la historia de las justas deportivas. La deportista logró un triunfo contundente tras alcanzar un salto de 15.17 metros.
Caterine se ratificó como la reina de la disciplina, tras un arranque en el que la kazaja Olga Rypakova metió presión con un salto de 14.73. A pesar de que en su primer intento no logró superar los primeros dos mejores registros, la colombiana dio un golpe de autoridad con una marca de 15.03 en su segundo intento.
Con Rypakova casi que fuera de combate, la joven venezola Yulimar Rojas emergió para hacerle frente a Ibargüen.
Con dos grandes marcas consecutivas, la primero de 14.87 y la siguiente de 14.98, en su tercer y cuarto intento, respectivamente.
Sin embargo, Caterine dio un golpe de autoridad y en su cuarto salto consiguió una marca contundente de 15.17, logrando su mejor marca en la temporada y asegurando el metal dorado.
Los saltos siguientes de Rypakova y Rojas no inquietaron el registro de la atleta de 32 años, que selló con el oro cuatro años de absoluto dominio en el salto triple, donde cosechó 36 victorias en un total de 37 competencias.
Ibargüen, además, escribió con letras doradas su nombre en la historia del deporte colombiano, junto a María Isabel Urrutia, Mariana Pajón y Óscar Figueroa, quienes también conquistaron el metal dorado en unas jutas deportivas.
Caracol Radio
Caterine se ratificó como la reina de la disciplina, tras un arranque en el que la kazaja Olga Rypakova metió presión con un salto de 14.73. A pesar de que en su primer intento no logró superar los primeros dos mejores registros, la colombiana dio un golpe de autoridad con una marca de 15.03 en su segundo intento.
Con Rypakova casi que fuera de combate, la joven venezola Yulimar Rojas emergió para hacerle frente a Ibargüen.
Con dos grandes marcas consecutivas, la primero de 14.87 y la siguiente de 14.98, en su tercer y cuarto intento, respectivamente.
Sin embargo, Caterine dio un golpe de autoridad y en su cuarto salto consiguió una marca contundente de 15.17, logrando su mejor marca en la temporada y asegurando el metal dorado.
Los saltos siguientes de Rypakova y Rojas no inquietaron el registro de la atleta de 32 años, que selló con el oro cuatro años de absoluto dominio en el salto triple, donde cosechó 36 victorias en un total de 37 competencias.
Ibargüen, además, escribió con letras doradas su nombre en la historia del deporte colombiano, junto a María Isabel Urrutia, Mariana Pajón y Óscar Figueroa, quienes también conquistaron el metal dorado en unas jutas deportivas.
Caracol Radio
sábado, 13 de agosto de 2016
DEL POTRO "EL DERRIBADOR"
Del Potro continúa con su paso arrollador hacia el oro olímpico. Hoy se encargó de terminar el sueño de Rafael Nadal en un partido que tuvo que llegar a la máxima instancia de juego, 3 sets.
"El derribador" de campeones necesitó tres horas y algo más para eliminar al mallorquín, que ayer había ganado el oro en dobles junto a su compañero de equipo Marc López. Del Potro terminó con el sueño olímpico de dos tenistas del top five en lo que va de los juegos de Río 2016, el primero fue Nole Djokovic (primero del ránking) en la primera fase y en semis a Rafa Nadal(quinto a nivel mundial). Ahora Va por el número dos, Andy Murray.
Con parciales de 5-7, 6-4 y 7-6, el ovacionado argentino aseguró medalla para su país, buscando culminar su sueño dorado este domingo a partir de las 13:00 (hora boliviana) en la gran final ante el británico Murray.
"El derribador" de campeones necesitó tres horas y algo más para eliminar al mallorquín, que ayer había ganado el oro en dobles junto a su compañero de equipo Marc López. Del Potro terminó con el sueño olímpico de dos tenistas del top five en lo que va de los juegos de Río 2016, el primero fue Nole Djokovic (primero del ránking) en la primera fase y en semis a Rafa Nadal(quinto a nivel mundial). Ahora Va por el número dos, Andy Murray.
Con parciales de 5-7, 6-4 y 7-6, el ovacionado argentino aseguró medalla para su país, buscando culminar su sueño dorado este domingo a partir de las 13:00 (hora boliviana) en la gran final ante el británico Murray.
BOLT SE PASEÓ EN SU DEBUT
El velocista jamaicano Usain Bolt provocó la euforia de todos los presentes en el Estadio Olímpico Joao Havelange cuando saltó al tartán azul para disputar la primera serie de los 100 metros lisos en la que se impuso con un tiempo de 10.07 segundos.
Y es que los objetivos de todas las cámaras ya apuntaban hacia el hombre más rápido del planeta antes de que llevase a cabo su primera actuación en los Juegos de Río. Con su particular y ya tradicional espectáculo antes de iniciar la carrera, el jamaicano hizo las delicias de todos los espectadores.
Tras esto, lo suyo fue un auténtico paseo. Tanto, que en los instantes finales de la serie, Bolt frenó como de costumbre en las rondas previas y se permitió el lujo de echar un vistazo a lo que hacía el bareiní Andrew Fisher, quien parecía por momentos dominar la carrera, obviamente, sin éxito final.
Además de Bolt, también pasaron a la acción su compatriota Yohan Blake y el estadounidense Justin Gatlin, dos de sus principales rivales por la medalla de oro. Con una marca de 10.11 el primero y con 10.01 el segundo, ambos se metieron en la siguiente ronda en el camino a la gran final.
La próxima vez que Usain Bolt pise el Estadio Olímpico de Río será el el Domingo 14 a partir de las 20.00h (horario boliviano) para correr las semifinales.
Y es que los objetivos de todas las cámaras ya apuntaban hacia el hombre más rápido del planeta antes de que llevase a cabo su primera actuación en los Juegos de Río. Con su particular y ya tradicional espectáculo antes de iniciar la carrera, el jamaicano hizo las delicias de todos los espectadores.
Tras esto, lo suyo fue un auténtico paseo. Tanto, que en los instantes finales de la serie, Bolt frenó como de costumbre en las rondas previas y se permitió el lujo de echar un vistazo a lo que hacía el bareiní Andrew Fisher, quien parecía por momentos dominar la carrera, obviamente, sin éxito final.
Además de Bolt, también pasaron a la acción su compatriota Yohan Blake y el estadounidense Justin Gatlin, dos de sus principales rivales por la medalla de oro. Con una marca de 10.11 el primero y con 10.01 el segundo, ambos se metieron en la siguiente ronda en el camino a la gran final.
La próxima vez que Usain Bolt pise el Estadio Olímpico de Río será el el Domingo 14 a partir de las 20.00h (horario boliviano) para correr las semifinales.
ARGENTINA LE GANÓ A BRASIL EN UN PARTIDO ÉPICO
El clásico tenía un valor especial para Brasil, no sólo por lo que significa el duelo regional: ponía en juego su continuidad en el torneo de básquetbol de Río 2016. El dueño de casa se jugaba su presencia en el Arena Carioca 1 contra el rival de toda la vida. Más allá de que para eso se confirme necesita de los resultados de España, el golpe era terrible. Era golpearlo desde el juego y desde el ánimo. Del otro lado, la Argentina tenía que levantar cabeza después de la caída ante Lituania. Demostrar capacidad de reacción, con el incentivo de hacerlo ante el enemigo íntimo. Y la fiesta fue albiceleste: la selección ganó 111-107 en el segundo tiempo suplementario, puso contra las cuerdas a los brasileños y se llevó un triunfo a puro juego y corazón. "Que salen a ganar, que quieren salir campeón", bajó de las tribunas. Fue un grito de guerra ante el silencio verdeamarelho.
Resultaron clave los 37 puntos y 10 rebotes de Andrés Nocioni -líder en ambos rubros-, así como los 33 puntos y 11 asistencias de Facundo Campazzo. Brilló el Chapu y se agrandó el base. Formaron una dupla letal.
El inicio del partido mostró mucho de lo que se puede encontrar en la mejor versión de este equipo. Con un Nocioni preciso y un quinteto sin fisuras, vapuleó a Brasil. Lo expuso y lo llevó a su mínima expresión con un parcial de 28-19.
Pero todo lo bueno del primer cuarto se tiró a la basura en el segundo. Fallaron las decisiones internas y las externas: Sergio Hernández no le encontró la vuelta a la rotación. La Argentina arrancó mal el segundo cuarto y lo que empezó como un simple paso en falso desembocó en 10 minutos que fueron desdibujando la actuación albiceleste. Los números de la primera parte hablaron por sí solos: Brasil, con más puntos, falló más desde la línea de tres, pero alcanzó un 72% de efectividad en la zona pintada. La muestra exacta de un mayor despliegue físico bajo el aro, de la rotación de los más altos y de un flojo desempeño argentino en defensa.
Tras el golpe de ir 52-44 abajo -luego del brillante 28-19 inicial-, la selección logró volver a ponerse en partido en el tercer cuarto. Falló, sí. Y no pudo irse en ventaja a la última parte. Pero sin Delfino, Ginóbili y Scola en cancha por varios minutos, el resto del equipo dio la cara. Con Nocioni como abanderado, pero también con buenos rendimientos de Campazzo y Garino. Es más, la Argentina llegó a estar 64-63 arriba, mostrando señales de recuperación. El cierre fue para Brasil: 72-67.
Ya en el final, aparecieron todos los condimentos de un clásico. Se achicó la diferencia, se potenciaron los roces y creció la presión. La Argentina lo empató en 85 con un triple de Nocioni a falta de 3.8 segundos. Fue parte de la superlativa actuación de las figuras de la tarde: falló Ginóbili, tomó el rebote Campazzo y empató el Chapu.
La paridad siguió en el primer tiempo extra, que terminó 95-95 y Manu tuvo la chance de inclinar la balanza en el último segundo, pero no pudo y mandó el partido a un segundo tiempo suplementario. ¿Había tiempo para más? Sí, la Argentina mostró mejor resto físico y se fue acomodando, más allá de algún susto. Con un Delfino errático (firmó la planilla con ceros en los ítems principales) y sin Scola ni Nocioni, ambos con cinco faltas, Manu y Campazzo se cargaron el final. Fue el resumen de la transición que tanto pide Hernández. De un recambio que tanto ilusiona. La Argentina ganó el clásico, puso al rival en crisis y celebró la clasificación a la próxima etapa. A puro corazón. Con el alma. Como manda esta generación.
La Nación
Resultaron clave los 37 puntos y 10 rebotes de Andrés Nocioni -líder en ambos rubros-, así como los 33 puntos y 11 asistencias de Facundo Campazzo. Brilló el Chapu y se agrandó el base. Formaron una dupla letal.
El inicio del partido mostró mucho de lo que se puede encontrar en la mejor versión de este equipo. Con un Nocioni preciso y un quinteto sin fisuras, vapuleó a Brasil. Lo expuso y lo llevó a su mínima expresión con un parcial de 28-19.
Pero todo lo bueno del primer cuarto se tiró a la basura en el segundo. Fallaron las decisiones internas y las externas: Sergio Hernández no le encontró la vuelta a la rotación. La Argentina arrancó mal el segundo cuarto y lo que empezó como un simple paso en falso desembocó en 10 minutos que fueron desdibujando la actuación albiceleste. Los números de la primera parte hablaron por sí solos: Brasil, con más puntos, falló más desde la línea de tres, pero alcanzó un 72% de efectividad en la zona pintada. La muestra exacta de un mayor despliegue físico bajo el aro, de la rotación de los más altos y de un flojo desempeño argentino en defensa.
Tras el golpe de ir 52-44 abajo -luego del brillante 28-19 inicial-, la selección logró volver a ponerse en partido en el tercer cuarto. Falló, sí. Y no pudo irse en ventaja a la última parte. Pero sin Delfino, Ginóbili y Scola en cancha por varios minutos, el resto del equipo dio la cara. Con Nocioni como abanderado, pero también con buenos rendimientos de Campazzo y Garino. Es más, la Argentina llegó a estar 64-63 arriba, mostrando señales de recuperación. El cierre fue para Brasil: 72-67.
Ya en el final, aparecieron todos los condimentos de un clásico. Se achicó la diferencia, se potenciaron los roces y creció la presión. La Argentina lo empató en 85 con un triple de Nocioni a falta de 3.8 segundos. Fue parte de la superlativa actuación de las figuras de la tarde: falló Ginóbili, tomó el rebote Campazzo y empató el Chapu.
La paridad siguió en el primer tiempo extra, que terminó 95-95 y Manu tuvo la chance de inclinar la balanza en el último segundo, pero no pudo y mandó el partido a un segundo tiempo suplementario. ¿Había tiempo para más? Sí, la Argentina mostró mejor resto físico y se fue acomodando, más allá de algún susto. Con un Delfino errático (firmó la planilla con ceros en los ítems principales) y sin Scola ni Nocioni, ambos con cinco faltas, Manu y Campazzo se cargaron el final. Fue el resumen de la transición que tanto pide Hernández. De un recambio que tanto ilusiona. La Argentina ganó el clásico, puso al rival en crisis y celebró la clasificación a la próxima etapa. A puro corazón. Con el alma. Como manda esta generación.
La Nación
jueves, 11 de agosto de 2016
PHELPS CONTINÚA IMPARABLE CON "SU FIEBRE DE ORO"
El sobrenatural Michael Phelps hizo trizas a sus rivales este jueves en Rio-2016 llevándose a casa su vigésimo segundo oro olímpico, una jornada en la que su compatriota Simone Biles, que vive más cómoda en el aire que en la tierra, fue aclamada reina de la gimnasia artística.
Ya casi no le queda espacio para colgarse medallas, pero Phelps, de 31 años, decidió echarse una al bolsillo: los 200m combinados, un título que ganó por cuarta vez consecutiva, algo nunca antes logrado en la historia de la natación olímpica.
Phelps, con un tiempo de 1:54.66, llegó con más de un cuerpo de ventaja de su escolta, el japonés Kosuke Hagino (+1.95 segundos), y el chino Wang Shun (+2.39), que completó el podio.
AFP
Ya casi no le queda espacio para colgarse medallas, pero Phelps, de 31 años, decidió echarse una al bolsillo: los 200m combinados, un título que ganó por cuarta vez consecutiva, algo nunca antes logrado en la historia de la natación olímpica.
Phelps, con un tiempo de 1:54.66, llegó con más de un cuerpo de ventaja de su escolta, el japonés Kosuke Hagino (+1.95 segundos), y el chino Wang Shun (+2.39), que completó el podio.
AFP
HISTÓRICA MEDALLA PARA FIYI EN EL RUGBY 7
El equipo masculino de Fiyi conquistó el jueves el título de rugby seven en los Juegos de Río al vapulear 43-7 a Gran Bretaña en la final del torneo inaugural de la especialidad, dándole a la isla del Pacífico su primera medalla olímpica de la historia.
La demostración de Fiyi en el primer tiempo fue impresionante, ya que llegó a ponerse 29-0 en el marcador antes de bajar el ritmo y permitir que los británicos al menos marcaran un try.
Osea Kolinisau, Jerry Tuwai, Jasa Veremalua, Leone Nakarawa, Vatemo Ravouvou, Josua Tuisova y Viliame Mata alcanzaron el in-goal contrario antes de que Dan Norton marcara un try en el final para los europeos.
Una vez que el mejor equipo del mundo completó su tarea y aseguró el oro, los emocionados jugadores se abrazaron en un círculo en el centro del campo y comenzaron a cantar mirando al cielo.
"Atacaron todo el partido, salieron a buscarlo desde el inicio y les dio resultado", dijo el británico James Rodwell. "Se consagraron campeones del mundo en los últimos dos años y ahora han sumado el oro olímpico, hay que felicitarlos".
Para llegar a la final, Fiyi venció 20-5 a Japón en semis, mientras que Gran Bretaña superó 7-5 a Sudáfrica.
En tanto, Nueva Zelanda derrotó 17-14 a los Pumas argentinos para quedarse con el quinto puesto.
Sudáfrica conquistó la presea de bronce al vapulear 54-14 a Japón, que había sido la gran sorpresa del torneo en su inesperado camino a semifinales en el que logró una histórica victoria sobre los All Blacks.
Las medallas olímpicas entregadas el jueves fueron las primeras en casi un siglo para el rugby, que se había disputado por última vez en 1924 bajo la modalidad de 15 jugadores.
Reuters
La demostración de Fiyi en el primer tiempo fue impresionante, ya que llegó a ponerse 29-0 en el marcador antes de bajar el ritmo y permitir que los británicos al menos marcaran un try.
Osea Kolinisau, Jerry Tuwai, Jasa Veremalua, Leone Nakarawa, Vatemo Ravouvou, Josua Tuisova y Viliame Mata alcanzaron el in-goal contrario antes de que Dan Norton marcara un try en el final para los europeos.
Una vez que el mejor equipo del mundo completó su tarea y aseguró el oro, los emocionados jugadores se abrazaron en un círculo en el centro del campo y comenzaron a cantar mirando al cielo.
"Atacaron todo el partido, salieron a buscarlo desde el inicio y les dio resultado", dijo el británico James Rodwell. "Se consagraron campeones del mundo en los últimos dos años y ahora han sumado el oro olímpico, hay que felicitarlos".
Para llegar a la final, Fiyi venció 20-5 a Japón en semis, mientras que Gran Bretaña superó 7-5 a Sudáfrica.
En tanto, Nueva Zelanda derrotó 17-14 a los Pumas argentinos para quedarse con el quinto puesto.
Sudáfrica conquistó la presea de bronce al vapulear 54-14 a Japón, que había sido la gran sorpresa del torneo en su inesperado camino a semifinales en el que logró una histórica victoria sobre los All Blacks.
Las medallas olímpicas entregadas el jueves fueron las primeras en casi un siglo para el rugby, que se había disputado por última vez en 1924 bajo la modalidad de 15 jugadores.
Reuters
miércoles, 10 de agosto de 2016
HONDURAS ELIMINÓ A ARGENTINA
La selección argentina quedó eliminada de los Juegos Olímpicos Río 2016, y en el momento en que Honduras disfrutaba el pase y los jugadores albicelestes caían presos del lamento, hubo uno que quiso descargar su bronca de la peor manera.
Tras el pitazo final, Jorge Luis Pinto --técnico de Honduras-- le dio un abrazo de reconocimiento al 'Vasco' Olarticoechea, entrenador argentino, mientras que los jugadores de Honduras también se acercaban a extenderles la mano a los compungidos futbolistas albicelestes. De pronto la transmisión televisiva mostró muy enojado a Lautaro Giannetti, el zaguero argentino que cometió el segundo penal que provocó el gol de Honduras, increpando a un rival. No se sabe bien a quién o qué jugador.
Pinto, el árbitro Mateu Lahoz, y los propios compañeros de Gianetti intentaban calmarlo y evitar el descontrol. Los jugadores hondureños optaron por retirarse del campo, pero Lautaro Giannetti se mostró empecinado en descargar su enojo con el rival. Por el bien de Argentina, el fútbol y los Juegos Olímpicos Río 2016, todo quedó bajo control.
"Los dirigentes han destruido el fútbol argentino. Así no funciona. Ni siquiera para conseguir un mísero resultado", afirmaron los comentaristas argentinos de FOX Sports.
El Comercio
Tras el pitazo final, Jorge Luis Pinto --técnico de Honduras-- le dio un abrazo de reconocimiento al 'Vasco' Olarticoechea, entrenador argentino, mientras que los jugadores de Honduras también se acercaban a extenderles la mano a los compungidos futbolistas albicelestes. De pronto la transmisión televisiva mostró muy enojado a Lautaro Giannetti, el zaguero argentino que cometió el segundo penal que provocó el gol de Honduras, increpando a un rival. No se sabe bien a quién o qué jugador.
Pinto, el árbitro Mateu Lahoz, y los propios compañeros de Gianetti intentaban calmarlo y evitar el descontrol. Los jugadores hondureños optaron por retirarse del campo, pero Lautaro Giannetti se mostró empecinado en descargar su enojo con el rival. Por el bien de Argentina, el fútbol y los Juegos Olímpicos Río 2016, todo quedó bajo control.
"Los dirigentes han destruido el fútbol argentino. Así no funciona. Ni siquiera para conseguir un mísero resultado", afirmaron los comentaristas argentinos de FOX Sports.
El Comercio
martes, 9 de agosto de 2016
EL "TIBURÓN" DE BALTIMORE YA SUMA 21
Esta vez se contuvo. No lloró. En la piscina, se comportó como el monarca del agua y reclamó para sí los aplausos. Sentado en la corchera, con el torso firme, levantó los brazos e hizo la señal del uno con sus dedos. El primero, el número uno. Los200 mariposa fueron siempre uno de sus cotos favoritos, pese a su derrota en Londres, donde todavía posee la plusmarca mundial que acreditó en el Mundial de Roma. Está lejos de aquellos 1:51.51, a prácticamente a dos segundos, pero se encuentra lo suficientemente por encima de los demás como para alcanzar el oro en una prueba con marcas más discretas que en el pasado. Si este oro, el número 20, al que añadiría minutos después el número 21 en el relevo, lo ha conseguido con 1:53.36, la plata de hace cuatro años llegó con 1:53.01. Nadie en Río estaba en condiciones de romper esa barrera. Phelps lo sabía. De ahí su seguridad.
La victoria en una prueba individual tiene un valor mayor que la de los relevos, aunque su actuación en el 4x100, en la segunda posta, fuera más clave que en el4x200, donde partió último, con mucha ventaja ya de Estados Unidos. Sin embargo, hizo esfuerzos para que, esta vez, las lágrimas no se escaparan de su párpados. Sopló y sopló en el podio, mientras escuchaba el himno de su país con la mano en el corazón y los ojos en agua. Al final, le salvaron las risas, en complicidad con su familia, todos en la grada, a gritos. Al bajarse, Phelps rompió el protocolo, desoyó las instrucciones de los voluntarios, y escaló entre las cámaras para besar a los suyos, a la madre que siempre acompañó a este Edipo del agua, a su mujer y a su bebé, Boomer.
De todos los oros que Phelps ha conquistado, más que nadie en la historia olímpica, los de Río tienen un valor especial. Es visible lo que significan para el nadador desde el punto de vista emocional. Caminó por la piscina como si no quisiera marcharse. Apuró cada paso, cada gesto. Es consciente de que son los últimos en un escenario olímpico, pero sabe lo que significan después de haber perdido el rumbo. De Río no saldrá únicamente un campeón. También un hombre entero, un líder del equipo estadounidense, con la bandera en el desfile de la inauguración, y un líder deportivo, el primero para criticar la presencia en el Estadio Acuático de los nadadores rusos bajo sospecha.
La victoria en una prueba individual tiene un valor mayor que la de los relevos, aunque su actuación en el 4x100, en la segunda posta, fuera más clave que en el4x200, donde partió último, con mucha ventaja ya de Estados Unidos. Sin embargo, hizo esfuerzos para que, esta vez, las lágrimas no se escaparan de su párpados. Sopló y sopló en el podio, mientras escuchaba el himno de su país con la mano en el corazón y los ojos en agua. Al final, le salvaron las risas, en complicidad con su familia, todos en la grada, a gritos. Al bajarse, Phelps rompió el protocolo, desoyó las instrucciones de los voluntarios, y escaló entre las cámaras para besar a los suyos, a la madre que siempre acompañó a este Edipo del agua, a su mujer y a su bebé, Boomer.
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