Los celestes mostraron un buen desempeño en la primera etapa consiguiendo la apertura del marcador mediante un zapatazo de Erwin saavedra. En el complemento, de manera inexplicable, Bolívar le cedió la iniciativa a Boca que dominó toda la segunda etapa. La academia se defendió lo más que pudo, pero sobre el final del partido Carrizo amargó la alegría celeste con un golazo de tiro libre.
Un empate que pudo ser victoria para los xeneises, que desperdiciaron jugadas claras de gol en el área de Quiñonez. Un castigo justo para Bolívar, que patéticamente especuló con la mínima diferencia, y le regaló el partido a Boca.
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