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| Foto: José Luis Luna Poma |
Con dos golazos, de dos jugadores cuestionados por parte de la parcialidad boliviana, la verde consiguió su segunda victoria en la eliminatoria sudamericana. La primera había sido ante Venezuela en la segunda jornada de la clasificatoria.
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Pablo Escobar rompió el cero con un tremendo remate de tiro libre que dejó sin chances al portero Gallese. Era el minuto 37´ y la alegría de la minoritaria hinchada de la verde celebraba con euforia. Con la victoria por la mínima diferencia para los dirigidos por Hoyos, se fueron al descanso.
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El complemento fue un poco más favorable para los incaicos que buscaban la paridad, convirtiendo al portero Romel Quiñonez en figura del encuentro. Sin embargo el grito de gol estaba reservado solo para los bolivianos. Es así que cuando Perú apretaba con todo en pos de la igualdad, Bolivia obtuvo un tiro de esquina que fue muy bien aprovechado por el capitán de la verde, Ronald Raldes, quien se zambulló en la defensa blanqui-roja y con un cabezazo mortal venció por segunda vez a Gallese. Corría el minuto 87´ y nuevamente se estremecía el gigante miraflorino con el grito del gol bolivano.
Tras cuatro minutos de adición al final de los 90´ se terminó el partido y se consumó la victoria boliviana, la primera en la era Ángel Guillermo Hoyos.
El susto:
Todo el estadio quedó preocupado por la lesión de Jhasmani Campos. El 10 recibió un codazo en la nuca cuando disputaba un balón en el medio sector y tuvo que ser trasladado a una clínica con urgencia. Gracias a Dios Jhasmani se recupera favorablemente según el parte médico de la FBF.
La anécdota:
Fue muy llamativo el hecho de que Bolivia jugara como "visitante" en su propio reducto. Debido a la gran cantidad de hinchas peruanos, había una sensación de que se jugaba en algún escenario peruano. Aproximadamente el 70% del público asistente alentaba al combinado incaico.
El susto:
Todo el estadio quedó preocupado por la lesión de Jhasmani Campos. El 10 recibió un codazo en la nuca cuando disputaba un balón en el medio sector y tuvo que ser trasladado a una clínica con urgencia. Gracias a Dios Jhasmani se recupera favorablemente según el parte médico de la FBF.
La anécdota:
Fue muy llamativo el hecho de que Bolivia jugara como "visitante" en su propio reducto. Debido a la gran cantidad de hinchas peruanos, había una sensación de que se jugaba en algún escenario peruano. Aproximadamente el 70% del público asistente alentaba al combinado incaico.
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